La ataxia Cerebelosa Autoinmune o incapacidad para coordinar los movimientos musculares puede conducir a una grave discapacidad e incluso confinar a algunos pacientes a la silla de ruedas. Un estudio de Mayo Clinic publicado en JAMA Neurology, la Revista de la Asociación Médica Americana de Neurología informó que existen factores que permiten predecir una mejor respuesta a la inmunoterapia.
La ataxia cerebelosa autoinmune en los adultos, que normalmente aparece de manera rápida y avanza aceleradamente, puede dividirse en trastornos paraneoplásicos que son desencadenados por un cáncer en el cuerpo y los no paraneoplásicos, que son trastornos autoinmunes del sistema nervioso central no relacionados con el cáncer.
Los efectos neurológicos de la discapacidad, que abarcan el habla, los movimientos oculares y el equilibrio, pueden provocar inestabilidad al andar y problemas para tragar.
Si bien se ha publicado poco respecto a la respuesta al tratamiento y a los resultados neurológicos de los pacientes con ataxia cerebelosa autoinmune, al menos se há informado sobre 17 autoanticuerpos vinculados de forma causal a la enfermedad.
“Tradicionalmente se ha considerado a la ataxia cerebelosa como una enfermedad sin remedio”, comenta el Dr. Andrew McKeon, neurólogo de la sede de Mayo Clinic en Rochester y autor principal del estudio. “A pesar de que suele ser grave, la respuesta al tratamiento puede ser gratificante, especialmente en los pacientes con trastornos no paraneoplásicos”.
El equipo del estudio revisó los expedientes médicos de Mayo Clinic para examinar las respuestas al tratamiento y los resultados en 118 adultos con ataxia cerebelosa autoinmune que:
- Eran seropositivos en al menos un autoanticuerpo neural.
- Habían recibido por lo menos una inmunoterapia o terapia contra el cáncer.
- Tenían resultados informados por un neurólogo, entre 1989 y el 2013.
EL ESTUDIO
- Casi un 75 por ciento de los pacientes correspondían al sexo femenino.
- La duración promedio desde la aparición del síntoma hasta el último seguimiento médico fue de 25 meses.
- Entre esos pacientes, 63 sufrían trastornos atáxicos paraneoplásicos.
- 55 pacientes tenían trastornos atáxicos no paraneoplásicos.
- Los resultados del estudio muestran que generalmente, los médicos informaron de una mejoría neurológica en 51 pacientes con la inmunoterapia, mientras se beneficiaban de la terapia contra el cáncer.
- Los análisis plantean que entre los factores capaces de predecir tanto una mejor respuesta a la inmunoterapia como a los mejores resultados neurológicos, se incluyen un trastorno no paraneoplásico, la detección de por lo menos uno o más anticuerpos contra la proteína perisférica de la mielina, PMP, por sus siglas en inglés, o la detección de anticuerpos contra el GAD 65, isoforma del ácido glutámico descarboxilasa 65-kDa.
“El componente autoinmune es importante porque indica que el paciente potencialmente sufre una enfermedad tratable, pero también señala la presencia de un cáncer subyacente al que es preciso encontrar”, añadió el Dr. McKeon.
Independientemente de la respuesta a la inmunoterapia, 56 pacientes requerían silla de ruedas para movilizarse, 26 necesitaban andadores y 7 usaban bastones. El estudio informó que de los 29 pacientes restantes, 25 requerían de algún tipo de ayuda para caminar, aunque su marcha era normal, y cuatro pacientes podían andar con normalidad.
Fuentes
Entrevista al Dr. McKeon.